Y eso que volvemos a tener otro verano atípico en cuanto a noticias de alcance. Al tsunami provocado por la confesión de Jordi Pujol este miércoles se suma la entrevista entre el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, y el presidente de la Generalitat, Artur Mas, la primera con luz y taquígrafo en dos años.
El viernes, el Consejo de ministros aprobará su reforma fiscal, que remitirá a las Cortes donde se debatirá a lo largo del próximo otoño. Ese día, además, Rajoy se someterá a las preguntas de los periodistas, una práctica habitual en los últimos años antes de dar paso a las vacaciones pero que, en esta ocasión, marca también un cambio de estrategia de cara a parecer más accesible (y con mayor empatía al sufrimiento ajeno) de cara a las citas electorales que se producirán durante el próximo curso político.
Si la saturación informativa amenaza con ser causa de desarreglo mental, hagan caso de las recomendaciones de @lhermoso_ en Jotdown. Nosotros planteamos las siguientes para oxigenarse:
- Memoria del engaño, de J. Volpi: un buen retrato de los causantes de la quiebra financiera en EEUU y que la UE asumió en 2008.
- Revolutionarity Road o Una providencia especial, de Richard Yates, uno de esos escritores que están siendo merecidamente rescatados del olvido
- Limonov, de Carrère: primer libro que leí del autor y, seguro, no será el último
Si no, visiten:
- Breaking bad (cinco temporadas de una historia con mucha más chicha de lo que parece)
- Luther, con el magnífico Idris Elba pontificando sobre la maldad humana.
- House of cards, o ese tratado de cómo sobrevivir con éxito en la liga mayor de los políticos profesionales.
Hasta la vuelta.